La organización que data desde 2004 concentra el 65% de la venta de damascos a nivel nacional, los cuales en su mayoría son exportados a Estados Unidos y la Unión Europea.

Alrededor del 65% de la producción nacional de damascos proviene del Choapa y es específicamente en Chillepín, Salamanca, donde se concentra la mayor parte de esta industria, la cual data desde hace más de 50 años en la zona, según explica quien preside este destacado negocio, la cooperativa agrifrutícula de Chillepín, Nelson Durán.

LA COOPERATIVA EN EXPO CHOAPA
Datos y explicaciones que entrega en el marco de los preparativos de esta organización, que reúne a 65 agricultores, para participar entre el 23 y 26 de marzo en la Expo Choapa, instancia promovida por la Gobernación de Choapa que tiene como meta mostrar a la comunidad los distintos polos productivos y emprendimientos que se desarrollan en la provincia, especialmente aquellos que han contado con apoyo gubernamental.
En el caso de la cooperativa -entidad fundada en 2004 y que figura como la primera en la zona tras el retorno a la democracia- concentrarán sus esfuerzos en los frutos deshidratados que están trabajando.

EXPORTACIONES
Durán destaca que de los damascos que vende la cooperativa poco o nada queda en nuestro país “En Chile el damasco nuestro prácticamente no existe, se va a Estados Unidos, a la Unión Europea, entre otros países. Se va procesado, como jugo o pulpa, que es el trabajo que hace Agrozzi, la división agroindustrial de Carozzi y principal comprador de nuestros damascos”.
Otro grueso de la producción se va a Perú, un mercado poco tradicional para nuestro país, pero que no obstante abrió las puertas para recibir el damasco deshidratado que esta cooperativa también produce “llegamos al mercado peruano, porque nos queda cerca, además vendimos bajo la modalidad ‘puesto en Chile’, es decir entregamos en San Felipe y ellos exportan bajo nuestra marca que es “Alto Choapa” la cual está registrada legalmente” explicó el personero.

EMPLEOS Y PRODUCTOS
Durán comenta que gracias a las condiciones climáticas de la zona, con 600 horas de frío al año, el damasco se produce de manera masiva, lo que se traduce en que se genere un alto número de empleos “alrededor de la producción del damasco, entre los socios (65) y proveedores (70) giran sobre mil personas. Se necesita en promedio10 personas para producir una hectárea” aseguró el dirigente.
Asimismo el presidente de la cooperativa explicó que han ampliado el abanico de productos aprovechando una desidratadora que tienen a disposición gracias a la empresa privada “no solo producimos damascos deshidratados, también manzanas y tomates en este formato, además de huesillo”.

APOYO ESTATAL
Durán es claro y enfático en señalar que si bien este negocio es rentable, para hacerlo crecer el apoyo de las entidades gubernamentales como el Instituto de Desarrollo Agropecuario, Indap y la Corporación de Fomento de la Producción, Corfo, han sido fundamentales “hacer las inversiones con recursos propios es imposible, si no está el Estado apalancando recursos, para nosotros es difícil” comentó. Agregando que en este momento se encuentran trabajando con el Fondo de Investigación Agraria, FIA, para implementar una línea de producción de jugos.